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Monsterbox, el Valor de la Amistad

MONSTERBOX

Distintas edades y etapas de la vida, distintos colores y formas, personas, criaturas y animales… Parece que no tienen mucho en común, incluso que no encajan, pero este corto nos demuestra que si.

La niña, que tiene como mascota un par de criaturas no muy comunes, acude a la tienda de un tradicional anciano cuya mascota es un pájaro. Al hombre, al igual que a su pájaro, les resulta extraña la mascota de la peque, aún así, le parece entrañable tanto su clienta como la situación, y le vende a cambio de unos “pequeños tesoros” que salen de su cartera una casita de madera para su mascota. La niña muy feliz por su compra, acude de nuevo en varias ocasiones a la tienda; donde el dueño le enseña a cuidar plantas con cautela para que florezcan sus flores. Sin embargo, un día acude un nuevo amiguito de la niña; que a su paso, y sin querer, rompe plantas y materiales de la tienda. El anciano muy enfadado, echa de la tienda a todas las criaturas y la niña se va muy triste. Pasan los días, y tanto el hombre como su pájaro, se encuentran tristes, echando de menos las visitas de su pequeña amiga y sus mascotas. Finalmente, tiene una gran idea, va a visitar a su amiga y bajo el árbol donde ella juega despliega un sinfín de escaleras para trepar al mismo, llenas de casitas de madera para sus mascotas. La felicidad inunda a nuestros protagonistas y juntos corren a jugar y disfrutar del regalo del anciano.

¿QUÉ NOS ENSEÑA?

No hay mucho en común entre un anciano y una niña, no es necesario nada más que conocerse para crear lazos de amistad. Este corto nos demuestra que nada importa ni la forma física ni los gustos, simplemente hay que atender, escuchar, compartir y comprender las necesidades y gustos de los otros para poder forjar una amistad.

Esta interacción entre generaciones y razas, nos enseña el valor de la amistad, el aprendizaje y la comprensión. La niña aprende a cultivar y cuidar plantas, al igual que a valorar todo el trabajo que conlleva una tienda de plantas. El anciano por su parte, comprende que no hace falta dinero, ni ser un animal real para poder sentir cariño por una mascota y para poder acceder a algo material. Con ilusión, pasión e inocencia su pequeña amiga le demuestra que todo ello es posible.

En el día a día nos encontramos con personas muy diferentes a nosotros, individuos que a priori pensamos que son “bichos raros” y que con el tiempo nos enseñan mucho más de lo que imaginábamos, incluso llegamos a ser inseparables. Simplemente, tenemos que sentarnos a escuchar, comprender y aprender de ellos. Aunque no compartamos los mismos gustos, debemos saber disfrutar de tiempo en amistad, prestar nuestro tiempo a compartir momentos con amigos y disfrutar de ello. Dejando de lado nuestras manías, gustos personales e ideales, de algo que difiere de nuestros pensamientos y actitudes, podemos ser capaces de abrirnos a comprender, escuchar y tolerar, lo que un buen amigo nos puede enseñar.

Cabe destacar que tanto en el corto, como en la vida real, nadie es perfecto, no todas las personas se van a comportar como a cada uno le gustaría, ni todo va a salir bien. La imperfección existe, y los fallos son necesarios. Nos podemos enfadar, llenar de rabia y querer olvidarnos de esa persona por actitudes y comportamientos contrarios a nuestra opinión. Pero todo va mucho más allá, no podemos valorar y querer todo lo bueno de un amigo/a o ser querido, y en el momento en el que esa persona haga algo que con lo que no estemos de acuerdo dejamos de querer su amistad o quererla un poco menos. Hay que valorar, cuidar, comprender y conservar a las personas con todos sus valores, actitudes y cosas buenas; al igual que las cosas no tan buenas. Aunque no nos guste y no lo compartamos al 100%, tenemos que guardar nuestra amistad con sus virtudes y sus defectos, con sus pros y sus contras. Por que recordemos que todos y cada uno de nosotros tampoco somos perfectos. Disfrutemos de las perfectas imperfecciones de nuestras personas incondicionales, demos margen de error y aprendamos a vivir y sacar el lado bueno de las imperfecciones que hacen completas a estas personas tan importantes en nuestra vida.

“Cada amigo representa un mundo dentro de nosotros, un mundo que tal vez no habría nacido si no lo hubiéramos conocido.”   Anais Nin

Psicología Infantil École

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